NARRATIVA

"NOOR", El nuevo álbum de Bocafloja.

“NOOR”, El nuevo álbum de Bocafloja.


Por Fabián Villegas.


Hace aproximadamente un año conversaba con Bocafloja sobre “footnotes”, un video corto que realizó Jay Z,  sobre masculinidad, amor propio e inseguridad, en el marco de su último álbum 4:44. A mi lo que me llamó particularmente la atención fue una especie de “estética” del ejercicio testimonial, “estética” de la confidencialidad  para abrir una conversación, por demás urgente y necesaria, como dijo Thelma Golden en 1998: “desde este borde de la frontera”, para referirse a masculinidades racializadas.


Cuando salió el video de “luz” el single del recién lanzado álbum “Noor” de Bocafloja, no pude evitar pensar sobre la “oxigenación” narrativa que le dan los ejercicios testimoniales a algunos proyectos creativos, y esto no por el criterio moralino de hacerlos más honestos, sino por la  simpleza que tienen para abrir conversaciones, la simpleza con la que le quitan algunos candados a algunas reflexiones. Mucho del cuerpo de trabajo de Bocafloja ha estado orientado a nombrar antagonismos coloniales, desigualdades raciales, disputar imaginarios y narrativas decoloniales. Pero, una cosa es hablar de estas pautas desde un campo estrictamente ideológico, y otra desde el ejercicio de una experiencia corporal, contada y narrada en primera persona. Como decimos, eso es otra cosa, esos son otros 20 pesos.


Luz me dio un feeling melancólico, totalmente distinto al hype anímico al que Bocafloja acostumbra a tener a su público a través de su música. Si “Patologias del Invisible Incomodo” es una metáfora a un final unapologetic de una película de Melvin Van Peebles y “Cumbe” la radiografía utópica de un tren sin frenos de Zanzibar a Varanasi, y de Ciudad de Mexico a Republica del Saharaui, narrado por un Amiri Baraka de Santa Martha con destino a un futuro 2060. “Noor” es el final de “Luz de la luna”, eso que decía Paul Gilroy donde toda reflexión sobre el cuerpo en el Sur global es una melancolía poscolonial.

“Noor” es definitivamente un álbum maduro musical y líricamente, excelentemente trabajado, impecablemente logrado.

Un caudal de potabilidad, en medio de una escena regional que se agota en rimar “hoyo con caldo de pollo”, como proeza estética e intelectual.

El uniforme de rapero latinoamericano hace muchos años le quedó apretado, el hombre de la boca floja está de vuelta. “Noor” Enhorabuena.

Disfrútenlo.


Las recomendadas en primera persona: Arde, Zacarías, Azul, Maghreb, Luz.


687206B7-475D-40F6-87C5-92A8D1848FD4.jpeg
FD4E8249-15EA-41F8-8131-0D4D9380378C.jpeg